Gracias.

El viaje fue emocionante. Podemos aterrizaba en el Consell avalado por un SI en una asamblea ciudadana. Tengo un despacho. Tanto que critiqué a los de la poltrona y lo primero que me asignan el día 9 es un despacho ¿Para mi? Si. ¿No puedo tener una mesa aquí fuera? Ellas son administrativas, tu eres Directora Insular de Transparencia, Participación y Buen Gobierno. Caray. La cara de mis amigos cuando les dije el nombre completo de mi nuevo trabajo. Yo diré que trabajas en Podemos, en el Consell y ya está. Pues ya está, eso es lo que hago. Trabajo en Podemos en una dirección insular que lleva a la máxima exponencia el ADN Podemos.


Transparencia: entendida como la sumisión a controles y autoregulaciones articuladas a través de la publicación de información y exposición de documentación sobre la gestión realizada. Y además de esa publicidad activa, la pasiva o respuesta a consultas ciudadanas sobre transparencia. Necesitamos dejar atrás las gestiones públicas opacas que atrapan los intereses ciudadanos entre los renglones torcidos de la política. Porque la derivada inmediata de un gobierno transparente es la rendición de cuentas sobre la gestión pública a los receptores de la misma, los ciudadanos. Porque un gobierno con los bolsillos transparentes y las manos libres, es un interruptor al crecimiento económico y mejor desarrollo social.






Participación: Empezamos el cambio porque queríamos participar. La presencia de la voz ciudadana en las decisiones políticas de los municipios y provincias es requisito indispensable para la regeneración democrática. Cuanto más participativa es una sociedad, el debate público es más enriquecedor, se crea más conciencia crítica y las iniciativas ciudadanas impulsan el progreso. La regeneración política que nos puso en pie, implica el cambio de escenario y de protagonistas, la política ya no se hace únicamente en los despachos a puerta cerrada sino desde la calle. Los protagonistas no son los elegidos sino los que eligen, que ahora deciden cómo y porqué.





Buen Gobierno: porque el pasado político de nuestro país es escabroso y oscuro. Los casos se acumulan en los juzgados y las trayectorias políticas terminan a golpe de Código Penal, acostumbrarse a los escándalos es tan peligroso como seguir permitiéndolos, por eso es necesario provocar con buenas prácticas la revalorización de la política y más aún en el mundo local que más cercano aún al ciudadano es si cabe. La creación de unas medidas que involucren a todo el equipo de gobierno no solo limita la acción política al interés público sino que es valor de la nueva política transparente, participativa y democrática que hemos venido a traer al Consell.





Las políticas de espaldas a la gente se terminaron en las urnas. El bipartidismo también. Traemos las ganas intactas y tenemos la preparación necesaria para poner en marcha todo un sistema político atascado en el beneficio del que más en detrimento del que menos.

Cambié el súper despachazo que me tenían preparado. Demasiado oscuro. Ahora tengo un despacho transparente, con cristaleras enormes delante y a ambos lados. He pasado de ser la chica que dobla camisetas a la chica de la pecera. A mi me gusta así, si lo que vamos a lograr es un Gobierno de cristal, entonces quien trabaja en ello debe dar ejemplo.

Desde que estoy aquí, mi vida no ha cambiado tanto como pensaba, sigo teniendo la pantalla rota del Samsung que me regaló Orange cuando les dije que me cambiaba a una compañía más barata. Sigo sin lavar el coche. Sigo pagando un alquiler asfixiante. Sigo llevando a mi hermano pequeño al parque alguna tarde. Y sigo buscando las ofertas en el súper. Sin embargo todo es diferente ya, y lo digo porque cada mañana a las 8, mis compañeros y yo, que antes nos reuníamos en el Bar Cruce entre ruidos de cafeteras, planeamos el día en el despacho de la Vicepresidenta, nos ponemos al día de las cosas urgentes, chirriamos con los asuntos pendientes que dejó el gobierno anterior, nos frustramos a veces por tanta burocracia y tanta ley mal hecha.

Por aquí vamos con una copia del programa a todos lados, supongo que para que nadie en la Casa, ni siquiera nosotros olvidemos para qué estamos aquí. Y al comienzo del día, mis compañeros de siempre, nos seguimos indignando, seguimos sintiéndonos parte de la lucha ciudadana con la Democracia bien alta, queremos hacer muchas cosas buenas. Seguimos queriendo hacer muchas cosas buenas. 

Como diría Bruce, estamos todos juntos en esto y está amaneciendo.