Todavía
estás en esa edad ajena a la segregación por sexo. Aún, lo que
distingue a papá de mamá es el aspecto físico. La ropa, el tono de
voz... No sabes cual de ellos es el hombre y quien la mujer porque
esos conceptos aún no los has aprendido mal.
Por
eso, cuando saco mis pinturas quieres pintarte los labios y me pides
la brocha del colorete. Por eso en las jugueterías, juegas con todos
los juguetes, con todos. La última vez que te llevé, casi aprendes
mal los conceptos de una manera imprevista cuando cogiste el carrito
de las muñecas y una señora te advirtió «Eso es de niñas...».
Me miraste preocupado y te dije seriamente que eso que había dicho
la señora era mentira, que los carritos son de todas las personas
que quieran jugar a las muñecas. Ajeno a todo, seguiste
paseando a la muñequita por toda la tienda, ante la mirada perpleja de
mucha gente que ha aprendido mal.
No
aprendas mal los conceptos, los roles, los clichés. No aprendas mal
nada. Es más fácil aprender bien que desaprender. No aprendas mal
que los términos asociados a la persona con un aparato reproductor
femenino son: familia, casa, dulzura, silueta esbelta, sonrisa, rosa,
ensalada, comedida, educada, delicada. No hagas caso, mienten. Y
delante tuya le diré a quien te haga aprender eso, que mienten.
No
te dejes embelesar por los conceptos que ensalzan a la persona con
aparato reproductor masculino como son: triunfo, competitividad,
inteligencia, templanza y fortaleza. No les hagas caso, mienten. Y
delante tuya, defenderé la verdad ante quien haga falta.
No
dejes que terminen el cuento con un príncipe salvador porque las
mujeres también rescatan. No dejes que te digan que ella estaba
encerrada en una torre, indefensa, hasta que él la liberó. Es
mentira. Puedes soñar con cuentos de hadas pero no dejes que te atrapen en una realidad falsa porque la verdad habla de que las mujeres
nos liberamos solas precisamente porque un hombre nos dejó
encerradas en una torre.
No
permitas que te cuenten mentiras, Mateo. Hay muchas esperanzas
puestas en ti, en los niños de hoy, en los hombres y mujeres del
futuro. No dejes que te contaminen con sus sexismos. Naciste persona,
luego la genética te dio apariencia de hombre. Pues no dejes de
serlo, persona digo. No te conviertas en una más, debes ser una
persona de verdad.
No
consientas ver que los libros que escriba tu hermana Azahara, se
clasifiquen en la sección de «Literatura femenina», lucha con ella
y con todas las escritoras para derribar carteles y etiquetas que no
conducen más que a mentiras y a confusión.
No
dejes que decidan que tu profesión no puede ser cajero de
supermercado, enfermero, secretario o pastelero. Vístete como
quieras. Diles a los profesores que no te gustan los equipos chicos
contra chicas, y si no te hacen caso cámbiate de equipo, seguro que
muchos más te siguen.
Lee sobre Olimpia de Gouges , Aung
San Suu Kyi , Indira Gandhi, Clara Campoamor, Hipatia
de Alejandría...No dejes que vuelvan a morir. Mantén viva la
historia de las asesinadas. Recuerda el daño que nos han hecho.
Recuerda la injusticia. No olvides a quienes nos encerraron en la
torre. No perdones.
No
entres en el juego de las diferencias por sexo. Señala a quienes lo
hagan, persigue a quienes lo hagan, denuncia a quienes lo hagan.
No
seas como los de hasta ahora Mateo. Que no te hablen de Igualdad cuando
ellos han asesinado a miles de mujeres. Que no te hablen de igualdad
mientras salgan anuncios que muestran que tener un cuerpo escultural
es el objetivo a conseguir por una mujer. Que no te hablen de
igualdad mientras haya etiquetas, o distinciones.
Mientras sigan relegándonos en la carrera profesional, mientras cobremos menos por sistema. Mientras se nos tache de putas por tener la moral sexual de un hombre. Mientras siga la ablación, la tortura, la lapidación, las violaciones, los velos, los burkas. Que no te confundan con mentiras. Que a nadie se le ocurra decir que lucha por la Igualdad mientras siga habiendo personas que te digan «eso es de mujeres».
Mientras sigan relegándonos en la carrera profesional, mientras cobremos menos por sistema. Mientras se nos tache de putas por tener la moral sexual de un hombre. Mientras siga la ablación, la tortura, la lapidación, las violaciones, los velos, los burkas. Que no te confundan con mentiras. Que a nadie se le ocurra decir que lucha por la Igualdad mientras siga habiendo personas que te digan «eso es de mujeres».
Sé feminista Mateo. Y defiende el término con la verdad.
ESTE 25 DE NOVIEMBRE NO ESTAREMOS TODAS, FALTAN LAS MUERTAS.